jueves, 10 de diciembre de 2015

El cambio, lo nuevo. La vida.

Cambiar de aptitud y vida es posible. Siempre he sido una persona muy negativa, triste y conformista. Tras una mala racha decidí cambiarlo. Deporte en lugar de llanto, trabajo en lugar de pena, físico y diversión en vez de autocompasión... Sabes qué?  FUNCIONA!!

Claro que no todo se arregla en dos días,  me ha llevado más de 10 meses conseguirlo, pero ahora estoy lista para mi nueva etapa. Pasarán cosas desagradables, pero no me hundirán. Serán baches, no avismos. Y aunque desee vivir enamorada, no se convertirá en la meta de mi vida, sino en un complemento que llegue cuando sea el momento y no antes.

Se acabaron las presiones y las prisas en mi vida, toca hacerlo bien!!! Tengo ciertas cualidades, que serán mejores o peores, pero son las mías y debo cultivarlas.

Los días  malos, ñoños o nublados los afrontaré con fuerza y lucha. Seré mejor persona y cuidaré de mis seres queridos como siempre.

A veces alguna situación no es lo suficientemente mala como para quejarte (porque podría ser peor), pero tampoco es buena. Si te quejas eres pesimista y desagradecido y si no lo haces, eres incapaz de pedir ayuda.

Rencores? Demasiado trabajo absurdo. Sólo recuerdos que se irán dispersando en la memoria como restos de experiencias ya pasadas. Es raro verse con otra persona y darte cuenta de que no era el definitivo.

Ahora tengo más ambiciones, más logros adjuntos, más ilusión y pasión. Lo nuevo que esté por llegar debe ser siempre algo que aporte, no que detenga.

Lo amado, amado. Lo pasado, pisado. Bienvenido presente!

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